Un fallo de los festivales de cine: Celebración de la pobreza india

Os traduzco un artículo sobre la presencia del cine indio en la escena internacional escrito por Gautam Bhaskaran: 

Cuando Nargis, fallecida actriz y amante de Raj Kapoor, Nargis, pronnunció su famosa ironía en el Parlamento (de la India) que directores como Satyajit Ray estaban interesados ​​sólo en la venta de la pobreza de la India fuera de sus fronteras, no estaba exactamente constatando un hecho sino que estaba haciendo una predicción.Es cierto que Ray ganó su primer reconocimiento en el extranjero - en Cannes en 1956 con su Pather Panchali, la canción del camino- y catapultó a la India a la altura del gran cine. Pero la película no era de ninguna manera una exaltación o celebración de la pobreza. Era de hecho poesía en la gente. La gente pobre, sí, pero los hombres y mujeres que no dudan sobre la dignidad y el respeto propio.Pero tristemente y trágicamente, el brillante cine de Ray de alguna manera se convirtió en un sinónimo de la pobreza de la India. La celebración de su gran obra significó una celebración de la pobreza y las privaciones de mucha gente de su país. Peor aún, Occidente, en particular, comenzó a mirar cualquier película india sobre los pobres como una especie de patrón para medir la excelencia cinematográfica.
 
Un ejemplo de ello es Slumdog Millionaire de Danny Boyle, que ganó varios Oscar hace unos años. Si se consiguió hacer a sus principales estrellas Dev Patel y Frida Pinto extremadamente felices (incluso el lanzamiento de su carrera), hubo muchos que quedaron consternados por este "éxito". Y no eran sólo indios. El maestro griego Theo Angelopoulos, que murió en un trágico accidente de tráfico en enero pasado, una vez me dijo que él se había salido de Slumdog Millionaire tras sólo 15 minutos del comienzo de la película. "No podía soportar la forma en que se celebra la pobreza", objetó.


Por desgracia, esta es la clase de imagen sombría y deprimente de la India, que es recogida por los festivales de cine de todo el mundo. El Abu Dhabi Film Festival, cuya sexta edición acaba de cerrar, ha proyectado dos películas de la India que no sonn exactamente brillantes o alegres.El debut de Manjeet Singh, Mumbai Cha Raja, tiene a Rahul  un adolescente como su héroe. Su padre borracho y sufrida madrastra no podían de ninguna manera construir un hogar feliz para el niño. Él deja la escuela, se hace amigo de un chico más joven que vende globos, y juntos llevan una vida de bromas, que pueden ser vistas como una diversión inocua. A menudo maltratado por su padre, aunque amado y cuidado por su madrastra, Rahul vaga por las calles de barrios pobres de Mumbai, donde hacer dinero es el mantra y el crimen una forma de vida. Rahul y el vendedor de globos Arbaz ayudan a Singh a explorar el lado oscuro de Bombai durante un festival de Ganesh empapado por las lluvias. Aunque Singh incluye momentos de alegría en la película, Mumbai Cha Raja es abrumadoramente triste con la cámara colándose para atrapar lo cutre y la suciedad. 

I.D. (la identidad) del director Kamal, es otro trabajo cinematográfico que se asoma a una India triste. Su protagonista, una mujer joven, no vive en un barrio pobre como Rahul, pero se encuentra con uno en Mumbai, cuando un hombre llega a su casa de clase media alta una tarde para pintar una de sus paredes que se derrumba y le mata. El resto de la narrativa de la película nos acerca a como la desventurada mujer se encuentra atrapada en una situación enrevesada. Se ve forzada por las circunstancias a asumir la responsabilidad del fallecimiento del hombre, e inicia un viaje frustrante por barrios marginales de la ciudad, con la esperanza de encontrar alguna pista sobre la identidad del hombre. Que se le escapa hasta el final. Si la película a menudo raya en lo increíble Kamal, parece obsesionado por los barrios marginales, cuya fealdad es capturada en su forma más desagradable. Casi microscópicamente. La cámara se adentra en algunas de las callejuelas más sucias y oscuros callejones de las chabolerías de Mumbai, recreándose y reflexionando sobre montañas de basura, y asquerosas cloacas. La heroína inteligente marcha alegremente a lo largo de estos callejones sucios y embarrados, con su iPhone en la mano y la cara llena de polvo. 
Una escena de la peli ID, del director Kamal.

Creo que se ha puesto cada vez más de moda entre los jóvenes directores de la India el crear un cine que refleja el lado más sórdido del país. Y, últimamente, la inspiración ha sido Boyle y su barriobajera "Slumdog millionaire". Es más, existe la creencia creciente de que Occidente y los innumerables festivales sólo están interesados ​​en ver una India que se revuelca en los residuos, y donde el crimen manda...

¿Los directores indios en serio creen que es sólo la mugre del país la que tiene el poder de atraer a una audiencia internacional? ¿Creen que sólo películas del tipo de Slumdog Millionaire - y ahora Mumbai Cha Raja y Kamal's ID - pueden hacerse notar en la escena mundial? Y así ganar premios. Yo tengo mis dudas.Si Pather Panchali Ray creó estilo, también lo hizo su Charulata y muchas de sus otras pelis. Y la pobreza no era su tema. 

(El autor Gautaman Bhaskaran ha escrito sobre la India y el mundo del cine durante más de tres décadas y puede ser contactado en gautamanb@hotmail.com)

Mumbai Cha Raja de Manjeet Singh, trailer de 1'55":
ID del director Kamal, una escena de 1'30":
 

Comentaris

Sin tener muy esclarecido el tema, creo que a la vez se puede hacer cine de calidad y denunciar la realidad de la pobreza, incluso mechando la historia con pinceladas de humor y alegría.

Un abrazo
ka ha dit…
y tanto, lo que pasa que hay gente que prefiere mirar para otro lado...