Los niños perro


Una leyenda urbana muy extendida entre el turisteo en India es que hay padres que les parten la columna a sus hijos para que sean más rentables mendigando...

A fine balance está resultando bastante chulo, fluidito y creíble... Un personaje secundario, un mendigo tullido nos cuenta ciertos secretos de la profesión:

No sé que les pasó a mis piernas. Siempre he sido así y no me quejo. Saco para comer y me reservan un sitio especial en la accera. Beggarmaster (el jefe de los mendigos) se encarga de todo.
Cuando era pequeño para mendigar por mí mismo me llevaban. Beggarmaster me alquilaba cada día. Estaba muy solicitado. Beggarmaster decía que era el que le daba más beneficios.
Un niño de pecho y tullido saca mucho dinero del público. Entonces vivía bien, entre pechos blanditos y no en una plataforma con ruedas, como ahora.
Pero un día perdí mi cara de nene y pesaba mucho para llevarme en brazos. Así que empecé a trabajar solo, arrastrándome sobre la espalda usando los codos. El master le enseñó las diferentes técnicas de pedir, para utilizarlas según la ocasión.
Según el tramo del día el jefe me mandaba donde había más gente, la hora de la oficina, de los restaurantes, del mercado...
Pero tardaba mucho yendo de un sitio a otro. Así que decidió ponerme la plataforma, qué majo, me faltan palabras. Paga a la policía para que no se pongan otros en los mejores sitios. Y nadie se atreve a robarte (este es el mayor peligro).
Para ser un beggarmaster hay que tener mucha imaginación. Si todos los mendigos tienen la misma enfermedad el público se acostumbra y no siente pena. Al público le gusta la variedad. Hay enfermedades tan extendidas que no funcionan. Por ejemplo, sacarle los ojos a un bebé automáticamente no da dinero. Los ciegos abundan. Pero un ciego sin globos oculares más nariz cortada... cualquiera afloja el monedero. O un buen bulto con mucho pus amarillo, funciona.

Yo he conocido mujeres que desafiando a la naturaleza, tienen un hijo de un año cada 3 meses, o que de repente se convierten en niña. Es lo que tiene no estar de paso. No son más que gente que se busca la vida (algunas son amigas de hace 9 años y me invitan a té, la mayoría podía vivir modestamente en su pueblo pero no tiene para la dote de la boda de las hijas).Se les coge cariño, pero lo malo es que parte de lo que se le da va a parar a gente que puede ser bastante chunga.

Comentaris

Junlus ha dit…
Cómo se puede tener un niño de año cada 3 meses???...supongo que serán adoptados para sacarles provecho. Un gran artículo, muy ilustrativo. Enhorabuena merengue.
ka ha dit…
ji ji
gracias.
Iba a contestarte pero creo que mejor hago una entrada nueva al respecto, pasado mañana aparece. Saludos
Enhorabuena Ka,

Gran artículo sobre una realidad que ahora aquí, en España, parece como muy lejana pero que era muy parecida en los años 70.

Un abrazo.
Santitos ha dit…
ya verás qué final... Mistry es un monstro de novelista