¿ Matar a los 4 violadores conseguirá que disminuyan las agresiones sexuales?

Esta es la gran pregunta.

En un país emergente en el que la mujer tiene que negociar su libertad  día a día. Y en el que es despreciada o minusvalorada. En el que el acceso tradicional  al sexo es a través del matrimonio o la prostitución. Tiene que cambiar la mentalidad de 600 millones de hombres y para ello habrán de pasar varias generaciones.

El año pasado se denunciaron casi un cuarto de millón de actos violentos contra mujeres, pero muchos más no se denuncian. La presión machista sobre las mujeres es constante, de ahí la obsesión por casar a las hijas lo antes posible y con la mejor familia posible. Pero la mayoría de las veces el peligro está dentro de la nueva familia, empezando por el marido. El problema es la falta de respeto.

Recientemente la policía de Kushinagar se negó a registrar una denuncia de violación a una niña de 14 años, pidiendo 50.000 rupias a su padre. Cuando este insistió y tras muchos insultos y vejaciones, consintieron en tomar la denuncia. Pero se llevaron a la chica a un cuarto donde la hicieron desnudarse "para comprobar si la denuncia era real". El enemigo está dentro del sistema, forma parte de él. La solución tiene que ir mucho más allá de castigar al infractor.

¿ Cuando un grupo de tíos es capaz de forzar a una mujer en un autobús, o en un bosquecillo urbano, donde no hay nadie ? ¿ Se va a poner a pensar en que igual le pillan y le cuelgan ? ¿ Y las violaciones que pasan en el campo, o en la misma casa de la víctima ?

Matar a quien mata ¿ aporta algo ? ¿ O pasa al olvido ? Si le encerramos de por vida, ¿ no seguirá presente el ejemplo ? Eso sí, es más caro.

(Una reciente campaña usa a las diosas hindús para concienciar sobre la violencia a las mujeres)

Un tribunal de la India ha condenado a muerte a cuatro hombres por el mediático caso de violación en grupo y asesinato de una chica en Delhi, el pasado diciembre, mandándoles a la horca por un ataque brutal. El caso se convirtió en un símbolo del maltrato desenfrenado a las mujeres y la incapacidad del gobierno para hacer frente a la delincuencia.

Al emitir su decisión, el juez Yogesh Khanna dijo que el ataque "conmocionó la conciencia colectiva" de la India. "En estos tiempos, cuando el acoso contra las mujeres va en aumento, los tribunales no pueden hacer la vista gorda a estos crímenes horribles".

Después de la condena a muerte, los sollozos de uno de los cuatro hombres, de 20 años de edad, Vinay Sharma, llenó la pequeña sala. Los agresores fueron 6, pero uno es menor de edad y fue condenado a 3 años de reformatorio y el otro se suicidó en la cárcel.

Al igual que todas las condenas a muerte, la decisión de Khanna debe ser confirmada por el Tribunal Supremo de la India. Cabe apelación su caso ante el Supremo, al Constitucional, o un improblable indulto político (se lo reservan para amiguetes forrados).

La familia de la víctima, así como numerosos políticos y funcionarios del gobierno, habían pedido hace tiempo la pena de muerte. La familia cuando se anunció la sentencia se sintió aliviada. "Estoy muy contento de que se haga justicia con mi hija", dijo el padre de la víctima, quien hace meses desveló el nombre de la víctima, aunque las leyes lo prohíben.

La chica tenía 23 años, volvía a casa con un amigo en diciembre pasado tras ver una peli, entraron en un bus vacío para volver a casa. Era una trampa. Dentro un grupo de hombres golpeó al amigo, sometieron a la chica y se turnaron para violarla. También la penetraron con una barra de metal, rompiéndole las tripas y provocando su muerte.

La ley india dice que la pena de muerte se debe utilizar sólo en "casos excepcionales". Qué se entiende por caso excepcional sigue siendo muy debatido. Sólo dos personas - ambos terroristas - han sido ejecutados en la India desde 2004.

Bajo intensa presión, el gobierno nacional liderado por el Congreso trabajó duro para proyectar una imagen de mano dura contra el crimen después del ataque, reformó una serie de leyes sobre la violencia sexual. Muchos en el Congreso, que se enfrenta a la disminución de apoyo y las elecciones nacionales del próximo año, habían dejado claro que quería que los hombres sean ejecutados.

El Ministro del Interior Sushilkumar Shinde, a principios de semana dijo que debían condenarlos a muerte, se alegró por la sentencia. "Se ha hecho justicia para la víctima y su familia ", dijo a periodistas en Nueva Delhi. "El juez ha dado un ejemplo para quien cometa este tipo de delitos".

Singh, el abogado defensor, vio una mano política en la decisión del juez. "El juez ha decretado la pena de muerte bajo presión política", dijo. "El castigo se ha dado por insistencia del gobierno". El padre de Nirbhaya (nombre fictício que da la prensa a la víctima) se ha apresurado a negarlo.

Como ya dije en este blog, el caso ha servido para sacar del armario a una práctica habitual en India, sólo en Delhi llevan 1121 violaciones denunciadas este año. ¿Por qué aumentan tanto las violaciones en la India? No paran de salir noticias en todos los medios, hasta en los periódicos locales, este verano he leido pequeñas reseñas de 4 líneas al respecto. La mayoría de los casos, más del 90%, son de hombres cercanos a la víctima, familiares, profes o vecinos. Antes, y aún todavía en la India rural, se estigmatizaba a la víctima y "lo mejor" que podía pasarle era casarse con su violador. Algunas mujeres coraje se organizan y luchan. Pero son las menos. Ni siquiera ciudades como Bombay que se consideraba libre para la mujer, se libran de casos mediáticos de violación. En Bangalore los radicales hinduistas se dedicaron a atacar alas mujeres que iban a los pubs, provocando el nacimiento del grupo bragas rosas.

La gente en India está contenta con el veredicto, que ha sido llevado por el canal express para satisfacerla.

Os reproduzco parte del comentario que ha dejado Ambar, desde Calcuta, respecto al tema:

Las personas que cometen crímenes brutales como la violación y posterior asesinato de mujeres en India, no pueden cambiar su mentalidad durante toda su vida porque la sociedad aquí es muy tradicional y conservadora. Ahora la pena de muerte trae un pequeño momento de felicidad entre la gente de India pero los crímenes van a seguir aunque creo que disminuirán. Si intentamos cambiar la mentalidad de la gente el resultado va a venir después de tres o cuatro generaciones como mínimo. Mucha gente apoya la pena de muerte pero en realidad la misma gente no ayudaría a una mujer en la calle durante la noche, y menos si bebe alcohol o fuma etc. Porque según la sociedad las mujeres que hacen estas cosas son malas y culpables de crear estos deseos horribles en los hombres -como las violaciones. Es muy curioso cuando AP Singh, el abogado defensor, culpó a la víctima indirectamente y dijo que quemaría viva a su hija si tuviera relaciones sexuales antes del matrimonio.

La sociedad creo que no va a cambiar de repente y hay que hacer muchas cosas para que la gente de la generación futura puede ver una sociedad mas abierta y con menos crímenes.