Mais Bombais

Todo es más aquí. El peri el doble de caro pero cuatro veces más gordo. Un templo en cada esquina, un ídolo en cada árbol. En las terrazas la gente nerviosa mirando de refilón, como esperando una venganza. Como si estuvieran sentados sobre un maletín lleno de dólares. Como si les quemase en el culo la pistola recién disparada. Son los más charlatanes y chistosos, por eso le venden ocio a todo el país, a medio mundo...

La ciudad sigue a lo suyo después de los atentados (un comando musulmán, supuestamente proveniente de Paquistán) que sufrió hace poco, no ha podido cambiar el carácter. En los cybers no se preocupan por hacerle el trabajo a la poli y quedarse con la fotocopia (yiros, le dicen aquí, de xerox) de tu paspor. Cosa que a los catetos bengalís les encanta (ficharte).

Todavía estoy esperando escuchar el idioma local, marathi. El hindi campa a sus anchas. Ibéricos del mundo, Bombay mola. Cosmopolitas y urbanitas, os digo lo mismo, pero descubridlo ustedes...

Comentaris