Trabajo infantil en Kathmandú

(Las fotos de esta entrada son de un club de fotógraf@s nepalís)
Paaru Rajbanshi perdió su padre antes de nacer y a su madre cuando todavía gateaba.

Una familia pobre de la comunidad Rajbanshi de su pueblo Korabari en Jhapa la acogió, Sus tres hermanas mayores trabajaban en distintas casas del pueblo.
La familia Rajbanshi la matricularon en el cole del pueblo, donde Paaru estudió hasta 4º curso. Con 9 años su hermana se la llevó a Katmandú, podía quedarse en la casa de los Shresta donde trabajaba.

La familia Shresta le había prometido continuar su educación pero nunca lo cumplieron. Dice Paaru, que ahora tiene 16 años. Le hacía trabajar desde la madrugada (en Nepal es habitual que las mujeres se levanten a las 4 a.m.) hasta las 10 de la noche. Nunca le dejaron volver a su pueblo,pero el año pasado ella consiguió estudiar con una ong que le consiguió un curso de formación profesional en Pokhara.


Pero los Shresthas no le dejaron ir a Pokhara y la policía la rescató el mes pasado. “Cuando les dije que quería ir a estudiar con la ong, la familia me dijo que la ong me vendería como prostituta en India”. Ahora por fin está aprendiendo un oficio gracias a una ong y su valentía para enfrentarse a la situación. Pero otras muchas niñas en su caso no saben como librarse del yugo de los adultos que las explotan.

Muchos de los niños que hacen trabajo doméstico no pueden ir al colegio. Una estimación de la International Labor Organization (ILO) en 2008 dijo que son unos 21,000 sólo en el valle de Kathmandu.

Milan Dharel, defensor de los derechos de la infancia, supone que el 30% de estos niños trabajadores no van nunca al colegio, y el resto acude irregularmente y acaba abandonando.

Por parte del gobierno el Director General del Departmento de Educación, Mahashram Sharma, dice que están tranquilos porque están gastando en una campaña de publicidad para concienciar a los empleadores... ¡ Qué incompetencia ! y que forma de derrochar el poco dinero público.
Por otra parte y como todos los años en verano, antes de las lluvias del monzón, hay barrios enteros de Kathmandú sin agua. La demanda es de 330 millones de litros diarios y la compañía suministradora pública sólo es capaz de encauzar 80 millones desde las fuentes de Sundarijal.

Comentaris